Sobre tu tumba
Escribes en versos finos
Tus recuerdos en aquel cabaret
Que en tus dulces sueños
Cantabas canciones de Bernavé
Estaba gris el cielo
Con sus nubes rotas
Con tristes llantos
Dejaban volar al velo
Bernavé era la costa del mar
Que nunca conoceré
Era la luna que nunca pisaría
Era esa pena que jamás curaría
Solía volar cerca de casa
Que estaba cerca de la chacra
Chacra donde se cosechaba
Todo lo que se sembraba
Era imposible escapar de su encanto
Terminar de hacer algo al conocerlo
Hasta la brisa más fresca
Se volvía cálida al posar en su flagelo
De repente un solcito,
En la ventana sonríe lentamente.
Un beso escondido tierno y suave,
Con sabor a tarde de tímida luna.
La ráfaga fuerte que sopla
Se convierte en suave brisa
Rindiéndose temerosa
Ante tu rostro tímido, pícaro
Calladas las olas del lago
Acarician tus pies
Mientras yo, trataba de acercar
Mis labios a los tuyos
Así amanecimos, juntos y el sol
La luna no te quería dejar
Tampoco yo, jamás.
El tiempo se detuvo, nosotros…
